miércoles, 16 de abril de 2014

Comanejo del Parque Nacional de Cahuita: derecho histórico comunitario en el Caribe Sur

María Suárez Toro,
Comunicaciones,
Foro Caribe Sur, 13/04/2014

Resumen

E
l sistema de “comanejo” (manejo compartido entre  comunidad y gobierno) del Parque Nacional de Cahuita en Talamanca ha sido reconocido nacional e internacionalmente como uno de los modelos más relevantes de la relación equilibrada entre la protección del ambiente y poblaciones aledañas a las áreas protegidas. 

Sin embargo, actualmente las autoridades han girado instrucciones a los organismos  gubernamentales para eliminar el comanejo comunitario del Parque. Las razones a las que alude la Contraloría General de la República se refieren a que la categoría de comanejo no existe en la legislación nacional.

Luego de dos décadas de compartir con las entidades gubernamentales un papel relevante  -  y muy bien evaluado -  de la administración del Parque, las propuestas del  gobierno para sustituir el comanejo  en Cahuita se remiten a que la comunidad se convierta en concesionaria de “servicios no esenciales” de alquiler de sombrillas, sillas de playa, baños, etc. en una primera fase que no se sabe cuánto duraría.

Es decir, que la comunidad que ha sido históricamente la que ha cuidado  los recursos del Parque,  entregó al Estado sus tierras para la conservación, además de co-administrarlas durante 20hos, ahora se convertiría en una entidad que debe competir en un sistema de concesiones y sólo para para realizar actividades secundarias muy puntuales.

La comunidad de Cahuita se está organizando para valorar y construir alternativas. Convocaron a una reunión entre la comunidad y el Sistema Nacional de Aéreas de Conservación (SINAC) el pasado 30 de marzo en el Centro Comunal de Cahuita para conocer las propuestas y dialogar sobre las alternativas.  Sin embargo el SINAC no llegó y más bien desconvocó la reunión.

Esa noche, en medio de la incertidumbre, las más de 25 personas de la comunidad decidieron convocar a una reunión amplia el 7 de abril propia de la comunidad para identificar sus opciones, entre las que se encuentran el fortalecimiento del modelo de comanejo comunitario mediante medidas que lo legitimen legalmente y organizarse para defender su modelo autóctono.

Están abiertos a conocer de qué se trata el asunto de las concesiones, asunto que desconocen porque desde que se llegó a un mínimo acuerdo sobre ello, el SINAC/MINAET siguió trabajando por su lado en torno a un proyecto de concesiones y la elaboración de un Plan de Manejo “top secret”, como le llamó un activista cahuitenho,  a espaldas de la comunidad, según expresaron dirigentes comunales en la reunión.

Unas 45 personas con liderazgo en la comunidad de reunieron el 9 de abril para informar a la comunidad y recoger ideas.  La asamblea comunitaria concluyó con la necesidad de convocar a una asamblea a fin de mes para nombrar la nueva Junta Directiva de la Asociación de Desarrollo Integral de Cahuita.  

Además se han propuesto reactivar la existente Cámara de Turismo de Cahuita y de ser necesario, activar su Comité de Defensa del Parque, además de elaborar un plan de trabajo nuevo para las circunstancias.  Entrar en contacto con la recientemente creada Asociación de Pescadores de Cahuita es otra de sus líneas de acción.

Buscan que el gobierno reactive la relación con la comunidad para informar sobre lo que hacen de cara al Plan de Manejo y las concesiones y se encuentre una salida justa.

Foto Suizoloco


Antecedentes

El Decreto Ejecutivo No. 1236-A de septiembre de 1970 creó eventualmente lo que hoy se conoce como Parque Nacional Cahuita. Además de sus tesoros naturales, este Parque ha sido destacado por su innovador sistema propio de comanejo, que fue el resultado de arduas luchas comunitarias que desembocaron entre 1998  al 2000 en la negociación de un sistema de coadministración del Parque bajo la forma de comanejo.
Ello significó in hito histórico en la resolución de conflictos entre las poblaciones aledañas a las zonas protegidas, ya que fueron las que protegieron esos recursos históricamente, además de haber puesto las tierras que les pertenecían. Con ello, sus vidas permanecían ligadas simbióticamente a las zonas protegidas.

Una muestra de ello se encuentra en un Estudio de INBIO del 2002.   Destaca que el aporte total local del Parque Nacional Cahuita ese año fue de 17 millones de colones fueron aportado a la comunidad más por concepto de donaciones de los turistas realizadas en la entrada de Playa Blanca.

El Estudio señala cómo de gastó el aporte ese año, evidenciando la combinación de aporte al Parque como tal y a la comunidad: Planilla del Comité de Manejo en el sector de Playa Blanca (sueldos, vacaciones, cargas sociales, etc.).  Servicios públicos (agua, luz, recolección de basura, reparación de senderos en el parque), Materiales y suministros, Compra de equipo, Inversiones en capacitación: cursos de salvamento y primeros auxilios, Donaciones: Asociación de Desarrollo Integral de Cahuita, Guardia Rural de Cahuita, Grupo Cultural Ashanty, Cen-Cinai, Escuela de Cahuita y al Comité del Cementerio.

INBIO señala además que aparte de ese aporte, el turismo es la actividad económica principal de los pobladores de Cahuita, que genera empleo para 147 personas de la comunidad. “En ese mismo año la comunidad se vio beneficiada con un ingreso total de aproximadamente 672 millones de colones a raíz de la existencia de esta área protegida.”

Dice INBIO que:

Si se suman los ingresos generados para los dueños de restaurantes y sodas, pescadores, guías, artesanos y otros negocios comerciales vinculados al turismo, estas actividades conexas aportaron un total de 130 millones de colones o una quinta parte del sub-total local al desarrollo de la comunidad. Este beneficio, generado mayormente gracias a la existencia del parque como núcleo del cluster turístico emergido, constituye una fuente de ingreso monetario importante para la gente local, dado el decaimiento de otras actividades productivas en la zona, principalmente cacao, banano y otros productos agrícolas. Lo mismo se puede decir de los 17,1 millones de colones a favor de la comunidad, que se recaudaron en el 2002 por concepto de entradas al parque en el sector de Playa Blanca (lo cual se basa en donaciones de los visitantes). Si bien este monto es todavía relativamente pequeño a causa de la modalidad de pago voluntario, tiene un alto valor simbólico para un replanteamiento de la gestión del parque nacional en favor de un comanejo entre el MINAE y la comunidad y, por lo tanto, para un empoderamiento comunitario en torno de la conservación de áreas protegidas.

Norma Cunningham es una maestra pensionada de Cahuita que trabaja  el Programa de Educación Ambiental del Comité del comanejo. Su trabajo consiste en llevar a las comunidades la educación sobre el Parque, tanto en escuelas como con adultos mayores y otros sectores comunitarios. “en la medida que la gente conoce el Parque y sus beneficios para la comunidad, aprecian la relación.  Los niños de ahora son las guarda-parques y guías turísticas del futuro y ya estarán formados integralmente porque es su cultura en la zona”, explicó al Foro Caribe Sur. Aclaró que es despertar de la comunidad de ahora sobre la necesidad del cuido ambiental es su principal expectativa y logro.

“Soy un hijo del Parque, ese Parque es mi madre - dijo al Foro Caribe Sur Antonio Mora – la relación con el parque es tan simbiótica que no puedo pensar que pueda vivir sin él,  me ha dado alimento, me ha dado vida, me ha dado educación, soy producto de ese comanejo comunitario.” Mora es un joven operario de servicios de turismo ecológico y miembro  sin cargo de la Asociación de Desarrollo.


Pero esa relación no siempre fue fluida.  A la altura del cambio de siglo, las  familias de la comunidad de Cahuita que entregaron sus tierras para la creación del Parque Nacional en la década de los 70 no habían recibido la debida indemnización de tres décadas, habían perdido las posibilidades de disfrutar de las playas, fueron restringidas de pescar en ellas, etc.  

“Existían conflictos porque a alguna gente no se le había expropiado y ahora querían pagarle a precios de 30 años antes; también  problemas limítrofes ya que legalmente el Parque empezaba en el rio Suarez, pero la gente del Parque se estaba tomando hasta otro rio, quedándose con muchas otras hectáreas de playa” explicó Antonio Mora.

La gota que colmó el vaso del conflicto entre la comunidad de Cahuita y las autoridades del Parque se dio cuando en 1994 el gobierno decide aumentar la cuota de entrada de extranjeros a los Parques Nacionales, de $5 a $15 dólares.

Marchas, manifestaciones y hasta tomas pacificas del Parque Nacional organizadas por un Comité de lucha comunitaria en defensa del Parque, desembocaron en la negociación.  En 1998, la entonces  Ministra del MINAE, Elizabeth Odio, logró que el gobierno pudiera indemnizar a la Decreto población que había entregado sus tierras para la conservación, se fijó la cuota el $10 dólares y se creó el comanejo como salida al conflicto.  


Creación del comanejo comunitario en Cahuita

El Ejecutivo Nº26929-MINAE  de Creación del Comité de Manejo de Recursos y Servicios del Parque Nacional Cahuita fue producto de una larga lucha que desembocó en un diálogo y negociación entre gobierno y comunidad, ampliamente descrito y documentado por la Lic. Gina Cuza Jones, ACLAC-SINAC-MINAET en 1998.

El Comité está compuesto por el director de áreas de conservación, el encargado del Parque, dos representantes de la Asociación de Desarrollo Integral de Cahuita y uno de la Cámara de Turismo.

Desde entonces el comanejo cumunitario del Parque ha representado una fuente de desarrollo económico, social y cultural para la localidad,  modelo que se inscribe en la visión más avanzada y moderna de acuerdo al derecho internacional que busca e y el equilibrio entre la gente y el ambiente.

Numerosas convenciones internacionales afirman el derecho de las comunidades aledañas a las áreas protegidas a participar como comunidad. Entre ellos se destacan la Declaración de la Cumbre de la Tierra (ONU)  y la Agenda 21 adoptadas en 1992,  el Convenio sobre la Diversidad Biológica de 1993 en los artículos 8 y 10.

Además están la Convención de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático; la Convención relativa a los Humedales de Importancia Internacional especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas (Ramsar, Irán) y la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación en los Países Afectados por Sequía Grave o Desertificación.

Leyes nacionales que promueven esa participación son la Ley de Conservación de la Vida Silvestre (,1998),  la Ley Orgánica del Ambiente (1995)  y la Ley de Biodiversidad (1998).

Adicionalmente. el comanejo comunitario afirma uno de las más recientes y modernas reformas de la Constitución: la participación directa en el ejercicio de la democracia, consagrada en la enmienda al Artículo 9.  Dice que “El Gobierno de la República es popular, representativo, participativo, alternativo y responsable. Lo ejercen el pueblo y tres Poderes distintos e independientes entre sí: el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial.” Ese primer párrafo del artículo 9, fue reformado por el artículo único de la Ley N° 8364, de 1o de julio de 2003 para añadir la palabra “participativo”.

Así, esa conquista y toda mejora que se le haga al régimen de comanejo comunitario,  constituye una afirmación de los derechos históricos de pobladores de Cahuita.


Un estudio del CATIE sobre comanejo en Centroamérica (2000) reconoce que CAHUITA es un ejemplo de coadministración del área protegida…  “Es la única reconocida en Costa Rica.”  El Estudio destaca que fue el  proceso de democratización en la región lo que permitió  iniciar la creación del denominado Corredor Biológico Mesoamericano como un sistema de ordenamiento de áreas naturales  que bringa oportunidades a la sociedad civil, abriendo expectativas y mecanismos hacia la “concertación social” para promover inversión y uso de los recursos. “Sin ello y sin democracia, no se puede hablar de comanejo de áreas protegidas” concluye el estudio.

De acuerdo esa misma fuente, en Centroamérica hay más de 100 casos de comanejo de áreas protegidas. Las categorías de manejo son muy variadas (más de 20) y cabe destacar que al menos 32 sitios están catalogados como de importancia internacional, 17 sitios RAMSAR, 8 sitios de patrimonio mundial y 8 reservas de Biosfera.

Las propias autoridades, en el Informe de la Contraloría General de la República, en el In (INFORME Nro. DFOE-AM-38/2005, 14 de diciembre, 2005), citando a Boriini (2000)  lo define así:  “El comanejo de áreas silvestres protegidas es una herramienta que se desarrolló en la década de los años 60, principalmente como instrumento para el manejo de conflictos originados en las comunidades aledañas principalmente en las limitaciones de acceso de los recursos naturales protegidos por los gobiernos.  Reconociéndose entonces como una falla en el manejo que se venía dando a las áreas protegidas. Las diversas acepciones al término comanejo, tales como: manejo conjunto, cogestión, manejo participativo y manejo colaborativo, se definen de forma  similar.”

El Informe (2005) destaca que el concepto ha sido desarrollado por varias organizaciones e instancias de la siguiente forma:
- “ Involucramiento de los usuarios locales de un territorio o conjunto de recursos naturales y/o    grupos interesados en su conservación, en la gestión y administración del área protegida donde    estos se encuentran. Es un arreglo institucional que implica una repartición de responsabilidades y    competencias y una clara definición entre el ejercicio de la autoridad pública y las pautas de uso,    acceso, control y posterior manejo de recursos de un área protegida dada." (Girot et al, 1998)

- “…responsabilidad compartida entre los sectores público (el gobierno) y privado (la sociedad civil), es una de las respuestas para promover un esquema participativo, descentralizado y democrático de conservación y desarrollo, orientado, modelo que puede desarrollar características de sinergía”  y de ganar-ganar, según el cual se complementan y multiplican capacidades y todas las partes se benefician./ El comanejo  de áreas protegidas (y de recursos naturales, en general ), en sus diferentes modalidades, se refiere al proceso en el cual dos o más actores sociales negocian, definen y formalizan roles y responsabilidades compartidos sobre su administración.”. (Corredor Biológico Mesoamericano, 2003)

- “ Es un modelo alternativo de gestión de recursos naturales o espacios silvestres protegidos, que promueve la democratización de la gestión ambiental y una distribución justa y equitativa de los beneficios derivados de la conservación; en donde, a través de una mesa de negociación multisectorial (Estado Sociedad Civil), se definen y garantizan entre sí una forma justa de distribuir funciones, derechos y responsabilidades para un territorio, área o conjunto determinado de recursos naturales. Además, es un proceso político y cultural por excelencia, que busca la democracia y justicia social en el manejo de los recursos naturales.” (Boriini (2000) 

Dentro de  las características de estos procesos, el citado Informe  menciona que “… se comparten las responsabilidades del manejo del área protegida, se mejora la efectividad en la protección y conservación, se reducen el gasto público, se logra mayor confianza en la entidad estatal a la que corresponde el manejo del área protegida,  se complementan las capacidades del sector público y del sector privado, contribuye a una democracia más participativa, y se descentraliza el manejo de los recursos naturales.”

Otras definiciones son las de
Pascal Girot (1998),  quién a escala centroamericana ha investigado en mayor grado la temática de comanejo de recursos naturales y áreas protegidas y define el mismo de la siguiente manera: el COMANEJO (también referido como manejo participativo, coadministración, cogestión o gestión compartida) constituye un arreglo institucional entre los usuarios locales de un territorio o conjunto de recursos naturales y/o grupos interesados en su conservación, y las agencias públicas a cargo de l administración de estos recursos. Implica una repartición de responsabilidades y competencias y una clara definición entre el ejercicio de la autoridad pública y las pautas de uso, acceso, control y posterior manejo de los recursos.” (Girot, Pascal O. 1998. Co-Manejo de Recursos Naturales y Areas Protegidas: Teoría y Práctica, CEESP /UICN. Documento impreso. 38p.

Concluye el CATIE en su estudio (2000) que la figura más utilizada en Centroamérica es la de convenios de comanejo o de cooperación técnica, los cuales son firmados generalmente entre la Dirección de Aéreas Protegidas y el grupo de la sociedad civil. Algunas veces los convenios poseen un grado mayor de apoyo y en consecuentemente mayor seguridad jurídica al tener la firma del respectivo Ministerio, al cual pertenece la respectiva Dirección.

Entrevista del Foro Caribe Sur con la Lic. Elizabeth Odio Benito, Ministra del Ambiente (MINAE) cuando de forjó y firmó el decreto de comanejo del Parque Nacional Cahuita en 1998.  "Del fondo de mi memoria extraigo recuerdos de esos tiempos heroicos en los que tratábamos de crear modelos propios de desarrollo sostenible para distintos proyectos en distintos Parques Nacionales y distintas regiones del país.  Uno de esos fue la idea del comanejo en Cahuita. No fue nada absolutamente original, existen por el mundo modelos  similares.  Pero tal vez lo original del de Cahuita esté en el fundamento que le encontramos a partir de la clara voluntad política del MINAE de encontrarle solución al problema.  Y es que ahí está el detalle.  Para mí, el derecho es un mecanismo de normas jurídicas que existen para solucionar problemas, no para crearlos; no para decirle a la gente que no se puede, sino para buscar la fórmula para que sí se pueda.  Por supuesto que si te apegas  a la letra pura y dura de las leyes y crees que están escritas en piedra, pues terminas afectando negativamente a la gente. Y siempre es mucho más fácil decir que no. Con Luis Rojas que era el Director del Sistema de Áreas de Conservación, con el director del Parque de Cahuita, cuyo nombre no recuerdo, y con la gente de la  comunidad, en mil reuniones y mil pleitos, fuimos llegando a ponernos de acuerdo.   Seguro que no le pregunté a la Contraloría si estaban de acuerdo o no para emitir el Decreto que redactamos con todo cuidado en el Minae y ya ven, que ha funcionado bien por muchos años.  ¿Por qué ahora quieren cambiarlo? ¿Tenía plazo? Si ese fuera el caso, sugiero que esperen a que el nuevo ministro del nuevo a gobierno asuma el cargo y tal vez con él, que es muy inteligente, puedan encontrar fórmulas de compromiso, como hicimos nosotros."

                                                        ¿Cual ha sido la experiencia?

Desde hace casi dos décadas se ha contado en Cahuita con un modelo de comanejo entre MINAET/SINAC y la comunidad que ha sido exitoso de acuerdo a varias fuentes que lo han estudiado a profundidad.

De acuerdo al Máster en Desarrollo Sostenible,
José Luis Fournier de la Universidad de Costa Rica, quien estudió el co-manejo del Parque Cahuita para su Maestría en Desarrollo Sostenible en el 2012, el modelo único de gobernanza del Parque Nacional Cahuita, comprobando que

… es la única experiencia concreta y de hecho de co-manejo existente el país.  Este es un ejemplo de alrededor de 20 años desarrollada por las autoridades del Área de Conservación La Amistad Caribe (ACLAC) y la comunidad de Cahuita. El proceso ha superado conflictos y ha promovido una autentica participación en la toma de decisiones a través de las instancias legítimamente establecidas en el marco de la Ley de Biodiversidad, tales como el Consejo Regional de Área de Conservación y el Consejo Local de Cahuita. El presente año, en el marco de la investigación de Maestría en Desarrollo Sostenible de la UCR, he realizado un estudio para analizar la situación del modelo de gobernanza de esta importante AMP del país.  Los resultados demuestran un impacto positivo en los temas sociales y de gestión de manejo del área silvestre protegida.  La comunidad  de Cahuita apoya al ASP y al modelo de gobernanza de co-manejo; esto producto de la participación en los espacios de toma de decisión y los beneficios locales de la gestión.  El Consejo, gracias a la recaudación de las donaciones, ha permitido desarrollar proyectos en la comunidad y el parque. Se implementa un riguroso sistema de control del dinero, supervisado en distintos niveles. Se han determinado aspectos de éxito: capacidad organizativa, liderazgo local, sentido de pertenencia, apertura del MINAET para trabajar con la comunidad y valoración de la identidad afrocostarricense y cahuiteña.

En una entrevista realizada por el Foro Caribe Sur el pasado mes de octubre, 2013 al director regional del SINAC-MINAET, Edwin Cyrus Cyrus sobre los derechos históricos de pobladores de Manzanillo, el funcionario presentó el ejemplo de comanejo del Parque Nacional de Cahuita como un resultado positivo de la relación histórica comunidad/área protegida, que no se había hecho con la creación del Refugio Nacional de Vida Silvestre Gandoca Manzanillo ni con otros.

El funcionario resaltó en la en la entrevista grabada (2013) que el modelo de Cahuita es digno de reconocerse por el aporte para evitar los conflictos que se han dado en otras zonas y porque reconoce el equilibrio entre ambiente y comunidad.

Por otro lado,
un estudio realizado en el 2012 por la organización no gubernamental CoopeSoliDarR sobre las dimensiones sociales de la conservación en las áreas protegidas marinas (APM) en Centroamérica y Costa Rica, brindó resultados relevantes para la afirmación del comanejo.  CooPeSolidaR cita la investigación de Fournier, sosteniendo que

… desde la percepción de algunas de las personas residentes en las comunidades aledañas a ciertas AMP del país, es este sector local el que ha soportado principalmente los costos de la conservación. En muchos casos miembros de las comunidades han perdido su tierra, el acceso a actividades de subsistencia y no han accedido a nuevas fuentes de empleo. No se respeta su identidad y tradiciones y quedan fuera del proceso de toma de decisiones, siendo un sector vulnerable desde lo social, lo cultural y lo económico. El estudio resalta la importancia de brindar mayor atención a los aspectos sociales de la conservación y abordar a las personas locales como aliados en la conservación y no solamente como una amenaza.

El investigador Fournier destaca además que una reciente auditoria promovida por el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) demostró el buen manejo de los fondos y donaciones recibidas, éste giró instrucciones para que al 31 de diciembre del 2012, se tenga la recaudación de las donaciones dentro del PNC, dadas por los turistas y señala que no pueden seguir apoyando a personal local para manejar el área.

El comanejo como “problema”,
¿Problema para quiénes?

Ente el 2005 y el 2006 surgen procesos paralelos que tal vez están conectados.

·        Desde el 2004, el Fondo Para el Medio Ambiente Mundial (GEF) con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) (proyecto no. 56040) invirtió inicialmente $335,000 para una primera fase de un proyecto conocido como “Venciendo las barreras que limitan la sostenibilidad del sistema de áreas protegidas de Costa Rica.”  Su fin era evaluar las barreras para  promover el turismo en áreas protegidas. La primera barrera que plantea el proyecto es el marco legal. “Reformarlo y mejorarlo para asegurar la gestión efectiva de la sostenibilidad financiera y ecológica a largo plazo del Sistema de Áreas Protegidas” es el objetivo. Otras barreras se refieren al marco institucional, a la capacidad del SINAC, a su sostenibilidad financiera y a su necesidad de incluir “nuevos enfoques para la conservación y el uso de modelos exitosos en la gestión del Sistema de Áreas Protegidas.” Eventualmente se ejecutó esa fase entre el 2005-2007 y en el 2009 el proyecto “Removiendo Barreras” recibió $4, 368,000 más que se añadieron los 20 millones del BID en el 2006.

·        El 26 de diciembre 2006 el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo millonario (20 millones de dólares) a Costa Rica para concesionar algunas funciones en las áreas de conservación. El proyecto “Venciendo Barreras” del SINAC ya estaba dedicado en mejorar la infraestructura en los parques nacionales para promover el turismo, “creando alianzas con interesados claves”.  Para ello ya estaban decretados y afianzados constitucionalmente los cambios legales necesarios:

·        El Decreto Ejecutivo 32357-MINAE del 13 mayo 2005 de “Reglamento para la regulación de concesiones en Servicios No Esenciales en las Áreas Silvestres Protegidas Administradas por el Sistema Nacional de Áreas de Conservación”  formalizó  la apertura de las áreas silvestres protegidas a los negocios el marco del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana. El decreto de las concesiones de servicios no esenciales posibilita que personas y empresas manejen recursos, procesos y servicios en las aéreas protegidas del Estado.

·        El 5 de julio 2006 la Sala IV declaró sin lugar  la  acción de inconstitucionalidad presentada por la Procuraduría General de la República contra los artículos 14, 17.1, 19, 20, 22, 25.1, 25.3, 25.4, 25.5, 25.8, 36 , 38 y 39 de la ley de Biodiversidad de 1998. Con esa sentencia 2006-09563, la Sala IV da beneplácito al Decreto anterior. Esos artículos descentralizan  la Oficina Técnica, el SINAC y a los Consejos de Aéreas de Conservación del MINAET.

·        En el 2005 la Contraloría General de la República concluye que el comanejo de las comunidades aledañas debe desaparecer por no tener asidero legal.  Para ello, la Contraloría realizó un estudio sobre el comanejo de otro parque, el Parque Nacional Marino Ballena en la Península de Osa. (INFORME Nro. DFOE-AM-38/2005, 14 de diciembre, 2005).   En el informe (luego de sendas deliberaciones que no vienen al caso) la Contraloría concluye que “la legislación costarricense no contempla el concepto de comanejo de áreas silvestres protegidas, por ello en la actualidad no es posible llevar a cabo en nuestro país procesos de comanejo que involucren estas áreas.”

“De un pronto a otro, hasta los mismos funcionarios que destacaban el comanejo en eventos internacionales y en entrevistas a periodistas, cambiaron de opinión, sosteniendo  que lo que hacemos es ilegal porque no existe en la legislación” señaló Antonio Mora.

¿De la participación comunitaria a la emprenduría comercial?

La metodología de los estudios de factibilidad del Proyecto “Venciendo Barreras” contempla como uno de sus objetivos específicos “identificar los impactos económicos, ambientales y sociales sobre las comunidades aledañas a las áreas protegidas.”
 

¿Cómo irán a evaluar ese impacto cuando las decisiones atentan contra la historia de la participación comunitaria, más bien las medidas deterioran los beneficios existentes para la comunidad?

Cronología de las órdenes desmontar el comanejo en Cahuita:
·       
  •          El 9 de noviembre, 2012 el Ministro del MINAET, envía una carta al Director del SINAC, Edwin Cyrus Cyrus, en la que le aclara que aunque el oficio DOEF-AM-38-2005  de la Contraloría Nacional de la República no menciona directamente el asunto de los cobros de cuota en el Parque de Cahuita, ya que el oficio de la Contraloría se refiere al Parque Nacional  Bahía Ballena, sí está mencionado en una alusión cuando señala que es lo que ocurre también en Cahuita.


La carta añade que el Informe No. ICI-04-2012 (ES-02-2012) de octubre  que contiene los resultados del  Estudio Especial de Control Interno realizado por la Auditoría Interna del SINAC sobre el cobro de tarifas de admisión al Parque Nacional de Cahuita se establecen recomendaciones vinculantes. Les recomienda que a la fecha del 28 de febrero del 2013 regularice y normalice  las responsabilidades de administración del Parque conforme el marco técnico y jurídico, que no contempla el comanejo, por lo cual se debe suspender y proceder a asumir oficialmente todas las acciones que hace el sistema de comanejo, entre ellos los cobros, servicio de cuido y visitas al Parque  y el uso de símbolos y recursos del comanejo.  Sugiere informar de inmediato a la Asociación de Desarrollo de Cahuita y al Comité de Manejo.

  • ·    El 27 de noviembre del 2012 el Director del SINAC envió tres cartas seguidas a la Asociación de Desarrollo de Cahuita y al Comité de Manejo de Recursos y Servicios del Parque Nacional Cahuita.


Citando el Oficio SINAC-DFOE-AM-38-2005 Informe ICI-042012(ES-02-201238-2005), les informa que oficialmente les queda prohibido “el uso de los distintivos, uniformes, equipos, materiales, papelería o implementos propiedad del Área de Conservación del MINAET”.  Una segunda carta fechada ese día también les pone el 31 de diciembre de ese año como fecha final para el cobro de la cuota voluntaria que se le cobra a visitantes que ingresan al Parque. Una tercera carta les comunica que ninguno de sus miembros están autorizados/facultados para realizar actividades de control y protección del Parque Nacional Cahuita.

  • ·        El 26 de julio del 2013 el Ministro del MINAET, René Castro, envía una carta al Director Nacional del SINAC, Rafael Gutiérrez Rojas,  en la que le instruye a proceder a realizar en el Parque Nacional Cahuita los Contratos Administrativos “para otorgar, en los casos que proceda, concesión de servicios complementarios enlistados en el artículo 39 de la Ley de Biodiversidad.”


Dice la carta que ello responde al “compromiso con la comunidad de  Cahuita de buscar alternativas legales y técnicas que permitan ampliar las posibilidades de desarrollo de la zona.”   La lista de servicios complementarios para la  primera etapa se refiere a lo que también han denominado “servicios no esenciales”, que incluye: paquetes de alquiler de sillas, sombrillas, camas de playa y casilleros; sanitarios, vestidores, dichas y parqueos; tienda de naturaleza y refresquería.

Desde el
2013 la comunidad viene alertando del peligro que significa la eliminación del comanejo comunitario. Si bien en cierto que hay distintos tipos de comanejo, el modelo de Cahuita es ya un derecho adquirido que se les estaría quitando.

“Nuestra ultima reunión con en MINAET fue en octubre del 2012 para explicar lo que iba a ser el Plan de Manejo pero luego de eso ya nunca más supimos nada y las concesiones darán con base a ese Plan de Manejo del cual no se nos ha compartido nada más” dijo Antonio Mora, añadiendo que para cada uno de los servicios a concesionar tiene que existir un estudio de factibilidad “y por buenas fuentes hemos sabido que los servicios que quieren concesionar no son factibles en el Parque Nacional.”


Reunión 30 de marzo, 
Foto Andrea Mora

Andrea Mora, recién ex presidenta de la Asociación Integral de Desarrollo de Cahuita y actual miembra del Comité de Manejo, explicó que aunque la comunidad ha tratado de conocer los alcances de lo que propone en SINAC, “la ausencia de información y de coordinación lo está dificultando.” 

“A inicios del 2013 tuvimos varias reuniones – una dos y tres veces fuimos - con SINAC y con el Ministro del MINAET para dialogar sobre los lineamientos del 2012 porque nosotros queríamos seguir con el comanejo y por eso nos fuimos a ver la partes legal para que las cosas continuaran como estaban y como se espera en nuestra historia comunitaria”   explicó Norma Cunningham, la maestra del programa educativo del comaejo.

Enfatizó que no se quedaron de  brazos cruzados, buscando una salida, “pero a la segunda mitad del año las cosas se enfriaron y no hubo no ha habido comunicación desde entonces, como si no quisieran dar la cara, que fue lo que pasó en la reunión convocada ahora a finales de marzo.”

El proyecto nacional Venciendo Barreras” contempla 7 estudios de factibilidad en el país, uno de ellos en el Parque Nacional Cahuita. 

Un estudio relámpago realizado por este medio para verificar si hay información a la comunidad de Cahuita, al público del resto de Costa Rica y al internacional sobre los avances del proyecto “Venciendo Barreras”, da cuenta que el último Boletín publicado por el proyecto data del 2011  y el Facebook del mismo, además de no contener información relevante, no ha sido actualizado desde hace más de un año.

Éste medio ha escrito a la Directora Ejecutiva del Proyecto en el SINAC, señora Giselle Méndez, a la Oficial de Programa del Proyecto en el PNUD, Monserrat Blanco  y, al Directora Regional del SINAC, Edwin Cyrus ,para actualizar la información.  Pero por ser la víspera de la Semana Santa, este medio no espera contar con una respuesta hasta más adelante, la cual será publicada en un reportaje aparte.

Lo que le pide la comunidad de Cahuita al resto del mundo



El llamado de la comunidad al resto de Costa Rica y a la comunidad internacional es a que la gente haga un esfuerzo por informarse acerca de los que es Cahuita y lo que es el Caribe Sur, de sus esfuerzos por vivir en armonía y trabajar duro para vivir.

“Necesitamos unirnos como comunidad nacional e internacional; que la gente conozca lo que pasa y que lo sepa porque haya información desde la comunidad misma” concluyó Norma Cunnningham.


“Cahuita no es lo que se pinta en San  José, una zona de vagos que no hacemos nada, somos gente laboriosa que hacemos mucho esfuerzo y que lo que hemos logrado en esta zona que a todo el mundo le gusta, es producto de nuestro esfuerzo histórico porque los gobiernos tradicionalmente no nos apoyaron” sugiere Antonio Mora, añadiendo que hay que rescatar este modelo de Parque conociéndolo, visitándolos y hablando con la gente que lo ha hecho lo que es. “!Lo que se perdería no lo perdería solamente Cahuita, sino el país y el mundo!”